Organiza: Asociación de Amigos del Museo de la Naturaleza y el Hombre
Ponentes:
Dr. Emilio Cuevas Agulló. Director del Centro de Investigación Atmosférica de Izaña y Doctor en Ciencias Físicas.
Dr. Fernando de Ory y Ajamil. Observador y técnico del Centro de Investigación Atmosférica de Izaña y Doctor en Historia
Hora: 19:00 hs.
Lugar: Salón de actos del MNH
Esta charla pretende mostrar y dar a conocer con motivo del centenario de la creación del Observatorio Atmosférico de Izaña, sus antecedentes, su origen, su historia y su realidad presente y futura.
Se demostrará su enorme trascendencia como institución científica insular y nacional, desde puntos de vista tan dispares como complementarios.
El Teide ha sido y es un lugar de encuentro de naturalistas y científicos desde hace cuatro siglos. En 1645 la Royal Society of London, dos años después la invención del barómetro por Torricelli, enviaba a dos de sus miembros a “medir su elevación y el peso de la atmósfera”. Desde entonces, una incontable sucesión de célebres investigadores europeos –Humboldt, Darwin, Piazzi Smyth, Ferrel, Angstrom…- y muchos otros “curiosos impertinentes” han visitado la isla de Tenerife para satisfacer su interés por una naturaleza privilegiada para el estudio de las ciencias naturales en general –Meteorología, Astrofísica, Geología, Botánica, Entomología, Oceanografía-.
El origen de la creación del Observatorio de Izaña, el primero que tuvo el Servicio Meteorológico Español –a excepción de su matriz en El Retiro-, fue un asunto político y diplomático seriamente resuelto entre los gobiernos de España y Alemania antes de la I guerra mundial. La enérgica y creciente pujanza de la ciencia y la industria militar alemana les condujo a Las Cañadas del Teide, donde hallaron una altiplanicie óptima para el uso de un aeródromo de zeppelines.
Creado el observatorio, que dio lugar a la creación del cuerpo de meteorólogos y auxiliares de meteorología, éste se constituyó inicialmente como una inestimable escuela para los primeros meteorólogos de lo que hoy es la Aemet.
Desde su creación hasta hoy han pasado cien años. El observatorio se ha convertido en un centro de investigación atmosférica que compite en calidad e innovación con los mejores del mundo. Así lo avalan las investigaciones y los resultados de numerosas campañas internacionales, además de las opiniones de los más y mejores estudiosos de la atmósfera.